Claudia y el caso Salinas Pliego

"Claudia y el caso Salinas Pliego", escribe Salvador Garcia Soto en #SerpientesyEscaleras

Entre las muchas herencias que recibirá de su antecesor, la doctora Claudia Sheinbaum tendrá bajo su cargo, a través del SAT, el conflicto legal sobre los adeudos de Grupo Elektra, propiedad de Ricardo Salinas Pliego. El caso se encuentra en estos momentos en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que probablemente la próxima semana resolverá sobre si es o no legítima la deuda de 35 mil millones de pesos que el Gobierno federal pretende hacer pagar al empresario regiomontano, luego de un largo pleito judicial que se politizó y terminó en un enfrentamiento verbal y abierto entre el presidente López Obrador y su antiguo amigo Salinas Pliego.

Esta semana, a unos días de dejar el poder, López Obrador habló por última vez de los adeudos fiscales que tiene el Grupo Elektra, propiedad del empresario Ricardo Salinas Pliego. Dijo que el asunto que está enlistado en la Corte para la próxima semana, ya no le tocará a él porque "yo me jubilo y voy a apagar el radio, la televisión y el Internet", y reiteró su postura de que Salinas Pliego tiene que pagar esos adeudos, "porque ya se demostró que debe ese dinero" y que a su juicio la Suprema Corte no puede resolver el fondo de ese asunto.

Sobre su amistad con el empresario regiomontano que lo apoyó y financió su campaña presidencial, Andrés Manuel reconoció que "somos amigos, pero las reglas cambiaron" y volvió a reiterar algo que ya había revelado hace meses, sobre un encuentro que tuvo con Ricardo Salinas en el que éste le pidió ayuda para resolver el tema de sus adeudos: "Ricardo Salinas Pliego viene en una ocasión a plantear de que quería un arreglo y dije sí, cómo no, vamos a buscar la forma de que legalmente, lo que no se justifique, según tu criterio y así lo considere el SAT, si es un abuso, un exceso y se te está cobrando de más, que se revise".

Y luego el propio mandatario contó que después de una revisión, "se llegó a que se iba a pagar una cantidad, creo que 14 mil millones de aquel entonces, quitando recargos y algo que podía hacer el SAT legalmente, sin violar la legislación fiscal, de todas maneras, eso se iba a poner a consideración del Poder Judicial, para que ellos dijeran si es válido el acuerdo o no. ¿Cuál fue su respuesta? No. Como yo ya me había comprometido y era una cosa de palabra y los compromisos se cumplen, de todas maneras, yo iba a decir aquí (en la mañanera) se llegó a este arreglo".

Apenas habían empezado a circular las afirmaciones del Presidente en su mañanera y el empresario dueño de Grupo Salinas subió un mensaje en sus redes sociales desmintiendo los dichos de López Obrador y acusándolo de mentiroso: "Una verdad a medias es una mentira. ¡Siempre una mentira! y hoy, como de costumbre, Andrés les mintió en la mañanera sobre lo que realmente ocurrió entre él y yo con respecto a los supuestos 'impuestos no pagados' por Grupo Elektra".

Y en un tono que confirma la ruptura que desde hace tiempo ocurrió entre él y el Presidente, Salinas siguió: "Andrés sabe perfectamente que el SAT pretende cobrarnos dos veces por lo mismo (en concreto, las pérdidas fiscales de los años 2008 a 2012). Primero, en distintas revisiones durante esos años, AFIRMARON que esas pérdidas NO eran deducibles y que debíamos pagar por ello. Después, en una revisión posterior del año 2013, CAMBIARON DE OPINIÓN y afirmaron que esas pérdidas SÍ eran deducibles, pero como la ley cambió, entonces debíamos pagar nuevamente y con toda la perversidad del mundo y ganas de extorsionarnos, dejaron abiertos los dos casos, pretendiendo desde el primer día cobrar dos veces por lo mismo".

Sobre el pacto o acuerdo que reveló el Presidente que habían hecho ambos en privado, Salinas Pliego negó lo dicho por AMLO y aseguró que lo único que pactaron fue que las pérdidas fiscales no eran deducibles, por lo que pagarían siete mil 600 millones de pesos, de los cuales hicieron un pago por dos mil 600 al SAT y quedaron pendientes cinco mil millones que se pagarían con un convenio judicial que dictaría la Suprema Corte.

"Fue precisamente por eso que hicimos el pacto para que los expedientes completos de nuestro caso fueran turnados al ministro Luis María Aguilar, con el pleno consentimiento del procurador fiscal y del entonces secretario de Gobernación, Adán Augusto López. Pero MAÑOSOS como siempre, los funcionarios del SAT no enviaron más que el expediente de 2013, dejando así abierto el tema de los años 2008 a 2012, situación que impidió al ministro Aguilar resolver en su totalidad nuestro caso. En pocas palabras, fue por culpa del SAT que nuestro expediente estuvo meses en el cajón del ministro Aguilar. Debido a todas estas mentiras e incumplimientos, decidimos demandar al Presidente, exigiendo conforme a derecho que respete lo que habíamos pactado. Confiamos en el juicio de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para que revise y dictamine sobre la improcedencia del doble cobro y de los enormes e infundados recargos", dijo el empresario.

Y para rematar el rompimiento total de la amistad que tuvieron, Salinas Pliego dijo en su mensaje: "Para ser sincero esperaba más de Andrés Manuel López Obrador como Presidente. No hay duda de que las malas compañías lo han llevado a irse por el mal camino, poniendo así en riesgo a todos los mexicanos. Recuerden que aquí estábamos antes de que ustedes llegaran, aquí seguimos a pesar de sus ataques y extorsiones… y aquí seguiremos cuando en cuatro días ustedes se vayan".

Ahora el tema, en espera del fallo de la Corte, recaerá en la administración de Sheinbaum Pardo. Y según nos confirman fuentes tanto del equipo de la doctora, como de Grupo Salinas, hasta la fecha no ha habido ningún contacto entre el poderoso empresario y la Presidenta electa. A pesar de que Salinas Pliego mandó a varios emisarios y operadores en los meses recientes a solicitar un encuentro privado con la doctora, la respuesta que les dieron desde su equipo fueron varias negativas.

Después de varios intentos, hace unas semanas un alto funcionario del equipo de la Presidenta electa por fin le dijo a los enviados de Ricardo Salinas que la doctora aceptaría reunirse con él en privado, pero le ponía una sola condición para que el encuentro se produjera: "que le ofrezca disculpas públicas a la senadora Citlalli Hernández, por todas las groserías y ofensas que le ha dicho en público".

Cuando los operadores fueron a decirle al impulsivo Salinas Pliego la condición que le ponían para verse con la Presidenta electa, su respuesta, según nos dicen las fuentes, fue tan contundente como sus mensajes en redes sociales: "Si esa es la condición, que esperen sus disculpas sentados".

Así que el caso está en manos de la Corte, pero corresponderá al gobierno de Sheinbaum definir, dependiendo del fallo de los ministros, la ruta que tomará este pleito fiscal por los 35 mmdp que reclama el gobierno. Si la Corte falla a favor de Salinas y le da la razón, habrá que ver si desde el gobierno acatan el fallo y qué tan rápido o de buena gana lo hacen; pero si la votación de los ministros no favorece al empresario la incógnita está abierta. ¿Qué hará la primera Presidenta ante uno de los empresarios más ricos, poderosos y rijosos de México?... Los dados cierran con Escalera Doble. Apostamos por la subida.